Espacios híbridos en las viviendas tienen gran acogida por los compradores

Ante una forma de vida diferente, sobre todo en familias jóvenes, se han creados espacios claves en las viviendas de hoy que mezclan funciones, que son más libres y cuyo uso mixto crea zonas como un baño integrado con un vestidor, o el espacio compartido entre la cocina, el comedor, el living y la terraza.

Hace un par de años, los ejecutivos de Socovesa se hicieron una pregunta que definiría la forma futura de “entender” y desarrollar” sus proyectos: ¿Por qué si los chilenos tienen otra forma de vivir y otra configuración familiar, los espacios tienen que seguir siendo iguales que hace 10 o incluso 5 años?


Hoy por ejemplo la cocina es un sector social, donde no sólo se hace la comida, sino también se comparte con la familia, con los amigos. Este cambio que la industria inmobiliaria primero tradujo como un family room adentro de la cocina, hoy necesita ser tan versátil y flexible para permitir cocinar, conversar, recibir amigos y comer, en el mismo lugar. 


De un ejercicio parecido nació el dressingroom, un espacio que rescata el vestidor como un espacio privado muy relevante dentro de la rutina diaria de las personas. Con el paso de los años, este recinto se fue perdiendo, cediéndole su espacio al clóset y al baño, de forma independiente. Hoy el vestidor está de vuelta pero en su versión 2017: un baño tipo hotel de lujo fusionado con el walk in closet. En un mismo sector ahora la persona puede ducharse, vestirse, maquillarse y probarse ropa, sin tener que transitar por dos recintos diferentes.

Fuente: Portalinmobiliario.com